Saludos mis citricos amig@s, aquí me tienen de vuelta después de dos días encamado, porque nada mejor que te contagien el último día de trabajo para joderte bien tus días libres...joder, a ver si un día le da por ponerse de moda las putas mascarillas esas que llevan los japoneses cuando están resfriados para evitar contagios...pero claro ¿en españa? ¿ser considerados con los demás? que va, el "que se jodan si me jodo yo" debería estar en la letra del inexistente himno nacional.
No es que traiga grandes aportes al blog ya que prácticamente me he pasado dos días durmiendo como marmoto, sin duda por alguno de los componentes del frenadol que curiosamente hacen el efecto que no logran esas inútiles pastillas para dormir, pero en los pocos ratos en que estaba despierto, bueno, aparte de descubrir un par de animes interesantes como ese de las chicas caballo que sigue la premisa japonesa de ponerle minifalda a todo pero por lo menos son honestos y saben hacer bien lo que hacen. También jugué una partida al sea of thieves que desembocó a la mayor troleada que hemos cometido hace años, ya que pillamos a un giri en nuestro barco, votamos para meterlo en el calabozo, y mientras bailábamos y tocábamos instrumentos a su alrededor, saboteamos el barco para ver como el pobre incauto se hundía con el en las profundidades...si señor, solo por las risas mereció la pena descargarse ese juego.
Y por supuesto, he jugado al titulo que nos ocupa, super hot. Es un juego indio curioso, por un lado algo engañizo porque da la sensación que es una especie de shooter con tiempo bala, cuando es más un juego de habilidad con una mecánica que juega con el tiempo como lo hacía el braid, osea, se avanza en el tiempo cuando el personaje avanza, aunque te permite girar sobre ti mismo o hacer acciones mientras los enemigos o sus balas están casi parados. Dicho así podría parecer un juego fácil, pero no, es el típico juego indio con dificultad hipster de esas que te matan 20 veces en un minuto por lo menos hasta que no le coges la mecánica.
Nos traen una estética que se supone que imita a un juego de los años ochenta, con sus cargas a partir de cassette y sus característicos ruiditos, o la pantalla imitando las crt antiguas... un pequeño apunte, en los 80 si existían gráficos vectoriales, pero no con esas texturas e iluminación que recuerda más a un mirrors edge más que a otra cosa, pero bueno, por lo menos no han recurrido al puñetero pixel art, en fin, parece que si no ponen sus pinceladas de postureo hipster no se quedan tranquilos.
Entonces ¿merece la pena éste juego? de seguro con lo popular que es tendrá legiones de seguidores, para mi me ha resultado un concepto original, algo difícil de encontrar en éstos tiempos, y suficientemente divertido como para pasar un buen rato aún cuando odio ese tipo de juegos en donde te matan tantas veces en plan super meat boy y su dificultad hipster que te corta el gameplay a cada momento. Además después de cada partida se ve la repetición en tiempo real y de ahí salen proezas dignas de john wick por lo que te aporta una recompensa bastante gratificante.
¿Consejos para jugar? bueno, tampoco me considero un experto, pero solo les bastará un par de partidas para que se den cuenta de que hay que avanzar con pies de plomo y girar sobre ti mismo constantemente ya que surgen enemigos por todos lados y armarse de paciencia. No se en cuanto estará en steam ahora, pero si lo pillan de oferta por precio de chuche denle un tiento.
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